Este 17 de junio se cumplen 500 años del descubrimiento de la Isla de Sacrificios por Juan de Grijalva, quien fue enviado por el gobernador de Cuba, Diego Velázquez de Cuellar con la finalidad de encontrar tierras que colonizar.
El director del Museo de la Ciudad de Veracruz, Ricardo Cañas Montalvo, relató para los micrófonos de XEU Noticias, que la expedición de Grijalva fue la segunda enviada por el gobernador cubano, siendo la que dirigía Francisco Hernández de Córdoba la primera en zarpar y que, al no lograr su objetivo tuvo que regresar.
Grijalva estuvo acompañado de más de 200 hombres en cuatro embarcaciones y llegó a la península de Yucatán, bordeo el Golfo de México y dio nombre a los lugares que se encontró a su paso como la Isla de Términos, los Cerros San Martín, el Rio Grijalva, Alvarado, el Río Banderas, y San Juan de Úlua, detalló Cañas Montalvo.
Posteriormente, Grijalva salió de lo que hoy es Boca del Río y el 17 de junio de 1518 avistó cuatro islas, desembarcó en la más próxima y se percató que de ella salía humo, acto seguido encontró dos pirámides en las que había un templo ceremonial, ahí descubrió los cuerpos de cinco jóvenes que tenían brazos y piernas fragmentadas, el pecho abierto con el corazón expuesto, tal impresión lo llevó a bautizarla como Isla de Sacrificios, explicó el historiador.
Agregó que de acuerdo a estudios recientes, se ha determinado que dicha isla no era utilizada para sacrificios humanos, sino para ritos funerarios, por lo que toda la isla es prácticamente un cementerio prehispánico donde se adoraba a la Diosa Chalchiuhtlicue, pareja de Tláloc y a Quetzalcóatl, divinidades blancas que vienen de donde sale el sol, según las creencias de la época.
El director del Museo de la Ciudad, manifestó que de acuerdo a registros cartográficos, en esta isla existió un pequeño baluarte que tenía conexión con San Juan de Úlua y la Ciudad de Veracruz, el cual tuvo fines militares y sirvió como lugar donde se trasladaba a personas enfermas para no contagiar a más personas.
Ricardo Cañas refirió que en la isla también se encuentran los restos de decenas de franceses que murieron en las intervenciones de los años 1838 y 1862, debido a esto, el gobierno francés mandó a construir un obelisco en la década de los 30, para señalar el lugar donde se encuentran sepultados sus coterráneos.
Además, el historiador comentó que fue en la Época Porfiriana, durante 1895, que se construyó un faro eléctrico de baja altura en la isla que posteriormente, en el año 1964 se cambió por el que hasta la fecha se puede observar.
Comentó también que el lugar fue cerrado por en la década de los 80, debido a la gran cantidad de visitantes que tenía, el manejo de la basura y al daño ecológico que presentaba, ya que se encuentra, justamente en un sistema arrecifal que es muy delicado de conservar.
Finalmente, Ricardo Cañas Montalvo, comentó que prácticamente el día de hoy inicia la conmemoración de los cinco siglos de diferentes puntos de la región, ya que con la llegada de Juan de Grijalva se trazó la ruta que llevó a Hernán Cortés, acompañado de 800 hombres en once embarcaciones, a fundar la Villa Rica de la Vera Cruz en abril de 1519.
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