En el sitio El Manatí fueron localizados 30 bustos tallados en madera que datan de la época en que habitantes de la cultura Olmeca estuvieron asentados en la zona sur de Veracruz en el año 1200 A.C.
En entrevista en el estudio “Don Fernando Pazos Sosa”, la arqueóloga del Instituto Nacional de Arqueología e Historia, Carmen Rodríguez, habló sobre estas esculturas, su descubrimiento y el sitio donde fueron encontradas.
Cerro Manatí, cerca de una laguna, está ubicado en San Lorenzo Tenochtitlán, que pertenece al municipio de Hidalgotitlán.
El proyecto se originó en 1988, luego de que varios campesinos encontraran varias figuras de maneras, las cuales se determinó pertenecían a la cultura Olmeca.
Después de ello, se creó un proyecto interinstitucional con participación de la Universidad Veracruzana, el INAH, y diversos investigadores.
“Los resultados de nuestra investigación nos dicen que los Olmecas vivieron en la cuenca baja del río Coatzacoalcos alrededor de 1500 años A.C. eran grandes conocedores de su medio ambiente, ocupaban las lagunas y los ríos, como ahora nosotros ocupamos las carreteras, como un medio de comunicación”, detalló.
“Es un descubrimiento muy importante, porque hasta la fecha no se había encontrado madera tallada en un tipo de árbol que no es duro ni resistente”, dijo sobre las 30 esculturas encontradas.
Además, también se encontraron otras evidencias en el sitio El Manatí, “que es muy importante porque es el antecedente más antiguo que tenemos en Mesoamérica sobre el culto al cerro”, como sucede a Cholula, Teotihuacán, etc, pero que son posteriores a El Manatí.
De las 30 figuras encontradas, algunas están en restauración en México, dos están en el Museo de Antropología de Historia, mientras que otros están en exhibición en el Museo Tuxteco.
Varios fueron sustraídos y hasta el momento no se conoce su paradero.
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cna/Foto: INAH
