A unos días de iniciar el periodo escolar 2018-2019, madres y padres de familia, realizan las compras de pánico del regreso a clases, las papelerías, los comercios dedicados a la venta de uniformes, librerías, incluso zapaterías registran importante actividad.
Según los consumidores, cotizar, planear y reciclar, son las acciones que pueden hacer que los gastos no se disparen.
Así lo recomendó Verónica Sánchez, quien dijo que ella inicia las compras de zapatos, mochila y otros artículos antes de finalizar el ciclo escolar anterior, para que al ingresar al nuevo, el gasto sea menor.
“No me gasté más de mil pesos en toda la lista de útiles. SI nos vamos a las marcas nos va a salir carísimo, hay que buscar, hay marcas más económicas y de buena calidad. Ellos cuidaron sus uniformes y les reciclé el pantalón, zapatos, ya nada más les compré camisa y los tenis de educación física; les compro zapatos antes de terminar y con esos mismo empiezan y ya no gasto, les vengo comprando nuevos a mediados del ciclo”, explicó.
Sin embargo, aunque hay quienes buscan ahorrar en este inicio de cursos, los gastos se llegan a elevar más de lo estimado, más cuando son más de un estudiante en la familia.
“Cada vez que los niños entran a la escuela pues ni modo hay que sufrirle un poquito. Tengo a dos niños, uno de primaria y otro de secundaria y entre los dos más de 3 mil pesos. Siempre les piden juego de geometría y nunca lo usan, al menos en la primaria; el diccionario en la primaria nada más lo traen de adorno, luego los cuadernos a veces se quedan con hojas sin usar”, dijo Carla López.
Quienes ingresan a la preparatoria o universidad, aunque no hay lista de útiles como en los grados menores, los gastos siguen siendo elevados.
“Acabo de ir a pagar 3 mil 300 y fracción de inscripción y uniforme, aparte la mensualidad porque no pasó el examen en la UV. Como no es una universidad súper cara, voy a gastar 4 mil 500 ahorita y ya empezamos con la mensualidad de mil 950, para mí si es algo, además que los carros, los libros”, mencionó Reyna Vegas.
“Mi hijo ya va en bachillerato pero pues si me he gastado algo con inscripción, uniformes y todo eso y todavía lo que le van a seguir pidiendo”, Josefina López.
Finalmente los padres de familia coinciden en que la inversión en educación siempre valdrá la pena, por lo que sin importar los sacrificios que se deban hacer, cumplirán con lo requerido para la educación de sus hijos.
