Vectores del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), sección 70, afirman que llevaban dos años en espera de los uniformes, ahora les llegó pero están incompletos, además les falta equipo de protección, dijo el secretario general de dicho sindicato, Jesús Galicia Reyes.
“Fueron 15 artículos de estos y nos faltaron todavía más, nos faltaron cascos, chamarras, chalecos y demás que deberían de haber sido otorgado a todos los trabajadores y desgraciadamente porque no hubo todo el presupuesto, a algunos trabajadores no se les va a entregar el uniforme como debe de ser, completo”.
Estos son los artículos que les llegaron en las dotaciones que recibieron.
“Se compraron lo que son camisas, pantalones, se compraron cafas, goggles, cubre oídos, mascarillas, filtros y botas, calzado”.
Señaló que cada trabajador debería recibir cinco dotaciones ya que el trabajo que realizan es sucio y peligroso.
“Es una semana completa la que se trabaja y el trabajo de nosotros es sucio, ¿sucio en qué sentido? De qué sudamos, trabajamos con insecticidas y tenemos que cambiarnos todos los días, no podemos venir con el mismo uniforme y presentarnos en los domicilios para poder hacer nuestro trabajo”.
Agregó que sin los uniformes no pueden realizar el trabajo.
“Sin el uniforme primero que nada está la inseguridad del estado y del país, segundo; si no hay equipo de protección no se pueden hacer las actividades”.
En ese sentido comentó que el pasado 3 de noviembre se registró un accidente con un trabajador el cual le cayó insecticida en la espalda.
“El día 3 tuvimos un compañero que se nos intoxicó precisamente por no tener el equipo de protección y por haber sufrido en una de las máquinas el derrame de insecticida y lógicamente no tenemos dónde bañarnos, no tenemos dónde asearnos, y poder acudir a nuestras casas y no contaminar a nuestros familiares”.
Comentó que el vector que sufrió intoxicación fue atendido en el ISSSTE y posteriormente la Jurisdicción Sanitaria le otorgó el acta de accidente de trabajo.
Añadió que necesitan áreas especiales para los trabajadores y almacenes para guardar los insecticidas.
