Alfonso Ortega, testigo en el caso de Javier Duarte, vendió de 14 inmuebles y terrenos adquiridos con recursos del erario de Veracruz, de acuerdo con publicación que realiza el diario Reforma, este martes.
Refiere que Alfonso ortega, quien ha colaborado con la PGR en las acusaciones contra Duarte, comenzó a vender las propiedades, entre ellas terrenos y un hotel en Tulum y Playa del Carmen, que fueron adquiridas presuntamente con recursos públicos.
Informa que dichos bienes con superficie de más de 45 mil metros cuadrados de extensión, tienen un valor superior a los 400 millones de pesos y son parte de un fideicomiso en el Deutsche Bank, no obstante, destaca que a la fecha no han sido aseguradas por las autoridades ministeriales, pese a que las empresas involucradas en la adquisición de derechos fueron beneficiarias de la administración de Javier Duarte.
Revela que, de acuerdo con documentos financieros y registrales, existe un precontrato de 180 millones de pesos por 3 de los 14 bienes en Tulum y Playa del Carmen, de los cuales ya se hizo un depósito inicial de 5 millones de pesos.
Informa que los mencionados terrenos están identificados como "Inmueble Pescadores", en la carretera costera Tulum-Boca Paila, e "Inmuebles Playa Paraíso 1 y 2", también en Tulum. Y que la empresa vendedora, Manudu Indi, S. A. de C. V., tiene su domicilio en una unidad habitacional de la Calzada Vallejo, en la Colonia Santa Rosa, Delegación Gustavo A. Madero.
Refiere Reforma que Moisés Mansur Cysneiros, el principal prestanombres de Duarte, presuntamente invirtió 7 millones de pesos en la adquisición, pero en diciembre de 2015 cedió sus derechos a una persona moral de la que Ortega era titular. Así como que las 14 propiedades de Ortega antes correspondían a las compañías KR, KR Playa VI, KR Playa XI, Kor Playa Ikal Real State y Kor Playa Tulum Real Estate.
Menciona que estas empresas se vieron en la necesidad de garantizar un crédito con Citigroup, emitieron pagarés a su favor y constituyeron el Fideicomiso F/353 de Deutsche Bank, al que aportaron sus bienes en Tulum y Playa del Carmen. Y que Citigroup tenía la calidad de fideicomisario, razón por la que podía hacer efectiva la garantía a su favor, en caso de que las empresas incumplieran con el pago del crédito.
