Con el paso del huracán Irma llamó la atención un fenómeno poco común denominado “marea de tormenta”, el mar se retira generando más playa, pero luego regresa y genera destrucción, no es un tsunami pero se parece, informa doctor Jorge Zavala Hidalgo, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera y del Servicio Mareográfico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“No es tan común porque para que ocurra se requiere que el huracán sea intenso, que tenga vientos muy intensos, importa la posición en la que se encuentra, la trayectoria que sigue, la velocidad de desplazamiento, la orientación de la línea de costa y la extensión de la plataforma continental; en muchos huracanes no observamos marea de tormenta muy importante o muy grande y esto es muy importante de subrayarlo porque si puede ocurrir en cualquier huracán de categoría mayor, una marea de tormenta importante”.
Destacó que la mayor parte de las muertos del siglo pasado a nivel planeta, asociados a huracanes, fue por marea de tormenta, ya que entra la gran marea de tormenta como una especie de tsunami, invade e inunda, se generan grandes corrientes que se llevan a su paso lo que encuentran, provocando ahogamientos.
Explicó cómo se forman las mareas de tormenta: “cuando el viento sopla por la superficie del mar provoca olas, corrientes y que las capas de la superficie se mezclen con las capas superficiales, cuando estamos en mar abierto entonces estas corrientes simplemente empiezan a evolucionar y a desplazarse, pero cuando estamos cerca de una costa puede ocurrir que el agua se apile, digamos, se empiece como elevar el nivel del mar o dependiendo de la dirección del viento y de las corrientes, el agua puede retirarse de la línea de costa, éste es el fenómeno que se conoce como marea de costa”.
Señaló que es: “Es un fenómeno que podría tener analogía con las mareas, digamos que sube y baja en una escala relativamente grande, en este caso, el área afectada abarca decenas de kilómetros, puede abarcar un área de 100 o 200 kilómetros en la vecindad de las zonas costeras y se genera más playa, pero lo más importante es el fenómeno contrario que es cuando se eleva el nivel del mar y ocurre una gran elevación y una gran inundación”.
El doctor Jorge Zavala Hidalgo dijo que puede darse el fenómeno a la inversa o sólo darse la inundación sin el retiro previo del mar.
Aclaró que: “La marea de tormenta es un fenómeno diferente a un tsunami, un tsunami es causado por un movimiento del fondo marino o un deslizamiento de tierra o un meteorito y es una onda que viaja abajo del mar, mientras que la marea de tormenta es causada por el esfuerzo del viento, de vientos muy intensos sostenidos en una dirección durante un tiempo importante en la presencia de una costa que empieza a apilar agua en la zona costera”.
Dijo que cuando el mar se retira puede regresar con mucha fuerza o lentamente, dependiendo de la velocidad en que se desplaza un huracán, no de la velocidad de los vientos sino de la velocidad de movimiento.
“Va a regresar a la velocidad de una onda, cuya velocidad depende de la profundidad de la región si la zona es muy bajita o muy somera, entonces esa onda se va a desplazar relativamente lento a pocos metros por segundo, 3, 4 o 5 metros por segundo, dependiendo de la profundidad; y si es un poco más profunda o rápidamente aumenta la pendiente, entonces la velocidad puede ser bastante mayor”.
Al analizar el huracán Irma, dijo que fue un fenómeno muy interesante al que le dieron seguimiento, fue un ciclón muy longevo, porque alcanzó categoría 5 durante un tiempo récord por muchos días, porque se pronosticó su trayectoria con muchos días de anticipación, pero fue errática en el sentido de que se pronosticó que se iba a desplazar casi de este a oeste con una pequeña componente hacia el noroeste y después que recurvaría hacia el norte, pero originalmente se pronosticó por el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos que lo haría por la costa este de Florida y hubo mucha evacuación, mucha prevención y sólo en los últimos 36 a 48 horas antes de que llegara a la Florida se empezó a comprender que iba a avanzar un poco más hacia el oeste antes de recurvar hacia el norte y que afectarías principalmente hacia la costa este Florida y extremo sur de la península de Florida”.
El doctor Jorge Zavala Hidalgo refirió que por ahí del año 1775 hubo una gran marea de tormenta en Veracruz, lo cual está documentado por el Dr. de León, historiador del puerto de Veracruz, en esa fecha la marea entró hasta 4 kilómetros costa adentro, llevándose a su paso lo que encontró.
El libro documenta esos datos y la información la recuperó de los Archivos de Indias.
Dijo que el saldo de esa marea de tormenta pero se sabe que hubo muchos decesos, tomando en cuenta que en ese tiempo la cantidad de pobladores era menor, pese a que era el puerto por donde salía la mayor cantidad de mercancías.
Así, el investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera y del Servicio Mareográfico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) recalcó que la marea de tormenta puede ocurrir en cualquier zona costera.
Asimismo, respecto a la temporada de huracanes, dijo que el 15 de septiembre es la el clímax, el momento que hay mayor frecuencia de huracanes tanto en el Pacífico como en el Atlántico.
