Sencillez, voz y carisma, características que llevaron al mexicano a considerar a Pedro Infante como un ídolo, aseguraron los cantautores Alex Lora, José Alfredo Jiménez Galvez, Memo Méndez Guiú y Memo Muñoz.
En entrevista por separado con Notimex, el autor de temas como “Triste canción de amor” y “Las piedras rodando se encuentran", Alex Lora, afirmó que Pedro Infante logró la inmortalidad, por ser auténtico, sencillo, carismático y talentoso con la voz, pero en especial como ser humano.
Explicó que fue auténtico, porque nunca pretendió ser alguien que no era, a pesar de ser actor y que podía adoptar cualquier otra actitud ante la gente: “Jamás perdió la visión del respeto y atención a la familia, a los amigos y al público, este último sector reconoció en él al representante de lo mexicano”.
Alex Lora, miembro del Consejo Directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), subrayó que Pedro, jamás confundió la realidad con la fantasía, y el éxito que tuvo lo tradujo en sonreír y ser feliz. “Así como cantaba, así actuaba y así trataba a la gente; nunca pretendió ser alguien que no fuera, no fue pretencioso, petulante o arrogante”.
Por su parte, el cantautor Memo Méndez Guiú, heredero también de un talento artístico por parte de la fallecida actriz, Emilia Méndez Guiú, quien trabajo al lado de Pedro Infante en la película, “Angelitos Negros”, destacó que Pedro fue dotado con un gran sentido del humor.
Añadió que el talento de Pedro era tan nato que para él ha sido, es y será el mejor actor mexicano de todos los tiempos: “Era un niño, nunca fue falso en su proceder y nunca abusó de la confianza de nadie, siempre estaba atento a darlo todo, era enemigo de las discusiones y de las injusticias”.
Por su parte, el cantautor Memo Muñoz, mejor conocido como “El Diablo de la Cumbia”, consideró que la idolatría a Pedro Infante radica en que "es el único que se ha quedado en el corazón de muchas generaciones, porque hoy vemos cómo la pasión popular se convierte en cariño, porque hasta hoy se siguen vendiendo sus discos”.
Por último, José Alfredo Jiménez Gálvez, uno de los herederos del catálogo más grande de canciones, destacó que Pedro Infante logró la idolatría a través de su carisma, sus actuaciones y su forma de cantar.
“La sencillez humana de Pedro lo llevó a ser amado; mi padre y él fueron grandes amigos, así que por boca de mi padre, me dijo que Pedro era enigmático y muy infantil. Fue el prototipo del mexicano, el portador de la mexicanidad y el símbolo de aspiración de las masas”, finalizó.
Fuente: Notimex/pmc
